4 febrero, 2022 - 39ytú
Departamento de nutrición ICLANP La ashwagandha, también conocida como withania…
16 octubre, 2020
Aunque solemos asociarla a la primavera, la astenia también aparece en otoño. Lo primero que debemos saber, es que no es una enfermedad, sino un síndrome temporal que cursa con varios síntomas como: falta de sueño, cansancio, dificultad para concentrarse, debilidad muscular, apatía o tristeza. En otras palabras, nuestra vitalidad se ve menguada sin una razón aparente.
El motivo principal parece ser la reducción de horas de sol, que, junto a la vuelta a una rutina, en ocasiones estresante, hacen que para algunas personas la llegada del otoño se haga cuesta arriba.
Pero como decimos, se trata de algo pasajero, de modo que, tan sólo necesitamos adaptarnos a la nueva estación.
Con la reducción de horas de luz se produce un cambio en la producción de hormonas, al que nuestro organismo necesita acomodarse.
Si hay una hormona especialmente afectada por las horas de luz, esta es la melatonina, que se encargada de regular factores como el sueño o la temperatura corporal.
La melatonina aumenta su producción cuando hay menos exposición a la luz solar, lo que ocasiona que baje la serotonina, conocida como “hormona de la felicidad”. ¿El resultado? un desequilibrio con el que aparecen los síntomas de la astenia otoñal como el cansancio y la apatía.
Lo cierto, es que el hecho de pasar a levantarnos día tras día aun de noche no sólo puede hacernos sentir cierta tristeza, sino que puede desajustar nuestro reloj biológico, regido por los ciclos de luz-oscuridad.
Finalmente, la bajada de las temperaturas puede afectar al buen funcionamiento de nuestro sistema inmunológico, que junto a no abrigarnos lo suficiente, o bien entrar abrigados a sitios con una fuerte calefacción que nos haga sudar, va a facilitar que acabemos con los típicos resfriados, lo que tampoco ayuda.
Si bien no hay una pauta que nos asegure librarnos de pasar por estos días de astenia, existen algunas claves que pueden ayudarnos a llevarlos mejor. Mantener una vida ordenada, donde se descanse lo suficiente, practique ejercicio de manera regular, y se siga una dieta equilibrada, ayudará mucho. Si además te reservas un tiempo cada día para practicar alguna actividad que te haga sentir especialmente bien, será un apoyo extra.