28 febrero, 2020 - 39ytú
Dra. Mª Salud Abellán Ruiz, profesora en la Facultad de…
8 enero, 2021
Akkermansia municiphila, conocida por muchas personas simplemente como Akkermansia, es una bacteria que interviene en la salud inmunológica y metabólica y cuya presencia está relacionada con la prevención de un gran número de enfermedades.
La microbiota intestinal está formada por una amplia diversidad y densidad de microorganismos, principalmente bacterias que, en su conjunto, forman un ecosistema maduro y resistente a las alteraciones inducidas desde el exterior. Por tanto, la microbiota intestinal juega un papel esencial en nuestra vida. A medida que ha aumentado el conocimiento sobre la relación de la microbiota intestinal con diversas afecciones humanas, se han desarrollado estrategias para interferir en la susceptibilidad al desarrollo de determinados problemas de salud mediante la modulación de la microbiota intestinal. Una de ellas es la administración de probióticos, que son microorganismos vivos que proporcionan efectos beneficiosos para la salud del consumidor reequilibrando la microbiota intestinal mediante el incremento del grupo de bacterias beneficiosas en detrimento de las bacterias nocivas. Así, en un estudio clínico se observó que la colonización del intestino por la mezcla probiótica a base de Bifidobacterium longum y Lactobacillus rhamnosus, incrementó la presencia de Akkermansia muciniphila en la microbiota intestinal.
Akkermansia muciniphila es una bacteria gramnegativa y anaeróbica, un microorganismo considerado como uno de los "probióticos de nueva generación". Su presencia se ha detectado en la microbiota colónica de la mayoría de personas adultas con una abundancia que va del 1% al 4%. Además, Akkermansia muciniphila también se encuentra en la leche materna, transfiriéndose al lactante alimentado al pecho, lo que explica su aparición en el intestino del lactante durante las primeras etapas de vida.
Resultado de nuestro Test de microbioma
Estudios recientes asocian la presencia de esta bacteria con una buena salud intestinal, ya que su densidad se correlaciona inversamente con varias afecciones. Así, se ha encontrado una abundancia menor de Akkermansia en individuos con enfermedad inflamatoria intestinal, colitis ulcerosa o enfermedad de Crohn, mostrando una clara relación con la inmunidad intestinal. En pacientes con apendicitis aguda, se correlacionó inversamente su gravedad con la cantidad de Akkermansia presente. Igualmente, se ha observado que la abundancia de dicha bacteria es menor en individuos con psoriasis.
Además de relacionarse con efectos beneficiosos sobre la inflamación intestinal, la presencia de Akkermansia muciniphila puede mediar en los niveles de hiperlipidemia y obesidad. Se ha observado que, en personas con elevado peso e índice de masa corporal (IMC), con niveles altos de colesterol y glucosa en sangre (en ayunas), la abundancia de Akkermansia en el intestino es menor que la encontrada en el intestino de personas con peso y niveles de colesterol y glucosa normales. Este hecho se observó también en niños, pues se encontró un recuento menor de esta bacteria en aquellos que presentaban obesidad. En un estudio realizado en guarderías, se observó menor abundancia de Akkermansia muciniphila en aquellos bebés que tenían asociado un mayor riesgo de desarrollar obesidad en etapas posteriores de su vida.
Entre los diversos factores que pueden influir en las características de la microbiota intestinal, la dieta sigue siendo el factor más importante y decisivo por ejercer una constante influencia en el estado fisiológico, desde la infancia hasta la vejez. Akkermansia muciniphila utiliza como única fuente de nutrientes (carbono, nitrógeno y energía) la mucina presente en la mucosa intestinal, mediante su degradación por la acción de las enzimas mucolíticas codificadas de su genoma. Esto es de gran interés, pues hace que su presencia en la microbiota intestinal sea menos dependiente de la dieta con respecto a otras bacterias, tal y como se observó en un estudio en el que la abundancia de Akkermansia muciniphila era alta aún en situaciones de baja ingesta de alimentos. No obstante, la composición nutricional de la dieta de un individuo modula el microambiente intestinal y así, un aporte nutricional desequilibrado, alto en grasas, azúcares y colesterol provoca una disminución de la abundancia de Akkermansia muciniphila. Por otro lado, la ingesta de prebióticos (sustancias resistentes a la digestión y fermentables por las bacterias del colon) como la inulina estimulan el crecimiento de dicha bacteria. Del mismo modo, los alimentos ricos en polifenoles como la granada, el arándano o las procianidinas de la manzana o la uva y la ingesta de ácidos grasos insaturados juegan un papel importante en la abundancia y mantenimiento de niveles normales de Akkermansia muciniphila en la microbiota intestinal.
Akkermansia muciniphila es, por tanto, un probiótico esencial cuya cantidad en el organismo puede ser determinante para la salud.